INTROYECCIÓN Y PROYECCIÓN.

Los Mecanismos de Defensa -freud-gestalt-perls-haiki

Unas breves pinceladas sobre el tema que nunca está de más recordar.

Queramos  o no nos pasamos el día proyectando. Hacemos proyecciones inconscientes, que muchas veces van de la mano de muchas transferencias.

Desde ahí, llegamos a mecanismos de defensa, y también a la famosa ley del espejo.

 

Por ejemplo, cuando alguien proyecta en otros ciertos rasgos o emociones que no reconoce en sí mismo, pero en este caso la reacción surge porque la persona que recibe la proyección se encuentra en la polaridad contraria al aspecto proyectado. Este tipo de dinámica no tiene un término específico universal, pero podríamos relacionarlo con la idea de la proyección complementaria, que se basa en la interacción de opuestos.

En psicoanálisis (especialmente en las teorías de Melanie Klein), existe el concepto de identificación proyectiva: una persona proyecta partes no deseadas de sí misma en otra, pero esta otra persona puede «recibir» esa proyección y, en ciertos casos, responder adoptando o enfrentándose a lo proyectado. En una situación de «polaridad contraria», se podría considerar que la persona resuena o responde al contenido proyectado desde el lado opuesto, buscando integrarlo o defenderse.

Como vamos viendo, lo interesante es ver el peaje que pagamos cuando nos vemos en este movimiento. Es decir, si nos hemos acostumbrado a irnos a la polaridad contraria de alguien importante del sistema familiar, a buen seguro que, no somos tan libres como quizás pensemos.

En la psicología del Eneagrama, se habla de cómo las personas se irritan con rasgos del otro que están en una polaridad contraria a la suya. Esto no tiene un nombre técnico generalizado, pero está relacionado con la tensión entre las energías complementarias que buscan equilibrio, como en una danza psíquica de opuestos.

Podríamos llamarlo «Resonancia inversa proyectiva». Con ello, podemos definir el fenómeno en el que lo proyectado conecta con el otro en su polo opuesto, causando irritación, pero también, a veces, atracción o necesidad de integración.

INTROYECCIÓN Y PROYECCIÓN, SEGÚN PERLS.

Proyección:

“(…) Es como un rasgo, una actitud, un sentimiento, o un fragmento de comportamiento que, realmente, pertenece a tu propia personalidad, pero no es experimentado como tal; en vez de esto, se atribuye a objetos o personas del entorno, y luego se experimenta como dirigida por ellos hacia ti, en vez de que sea al revés.” (1951) *

“(…) la proyección esencialmente es un fenómeno inconsciente. La persona que proyecta no puede distinguir en forma satisfactoria entre el mundo interior y el exterior. Visualiza en el mundo exterior aquellas partes de su propia personalidad con las que se niega a identificarse. El organismo las experimenta como si estuvieran fuera de las fronteras del ego y reacciona consecuentemente con agresión.” (1947) *

“(…) La persona que está inclinada a proyectar se parece al que está sentado en una casa con esperjos en todas las paredes. Dondequiera que mira piensa que ve el mundo a través de un cristal, mientras que en realidad sóo ver reflejos de las partes no aceptadas de su propia personalidad.” **

Introyección:

“(…) Es el desplazamiento de la necesidad organísmica emergente; es llevado a cabo a través de la inversión del afecto que, en un organismo saludable, acompaña la emergencia de una necesidad. Así, el que introyecta asume su apetito frustrado invirtiendo su afecto antes de que pueda reconocerlo. Este cambio de dirección se hace, sencillamente, mediante la inhibición misma. Lo que se quiere se siente como inmaduro, desagradable, etc. O al revés, si es un impulso para rechazar algo que está inhibido (oponerse a la nutrición forzada), se convence a sí mismo de que lo que no quiere es bueno para él, que es lo que realmente desea, etc. Pero lo coge sin degustarlo ni masticarlo”. (1951) *

“(…) Según Freud, el ego normal se constituye por cierto número de identificaciones… El psicoanálisis concibe la introyección parcial como parte del metabolismo psicológico normal, mientras que yo creo que esta teoría está fundamentalmente equivocada, al confundir un proceso patológico con uno sano… Pasaron por alto el hecho de que la introyección equivale a conservar la estructura de cosas insumida, mientras que el organismo requiere su destrucción.

Un ego construido con sustancias, introyecciones, es un conglomerado -un cuerpo extraño en la personalidad-.

Toda introyección, total o parcial, debe pasar por el molino de los molares trituradores para no convertirse en un cuerpo extraño o seguir siéndolo, un factor aislado y alterador de nuestro sistema.” **

* Extracto de “La resistencia y los mecanismos de la neurosis en psicoterapia gestáltica” _ André Sassenfeld J.

http://www.facso.uchile.cl/psicologia/caps/docs/La_resistencia_y_los_mecanismos_de_la_neurosis_en_la_terapia_gest_ltica.pdf

** Extracto de “Gestalt, Terapia de autenticidad” de Pedro de Casso.

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